Al comenzar el año, es habitual plantearse qué nos deparan los próximos doce meses y en la medida de lo posible prever a qué cuestiones deberemos enfrentarnos y qué objetivos nos planteamos. Numerosos expertos se plantean estas mismas cuestiones para esbozar cuáles pueden ser las tendencias dominantes en el diseño en este 2018. Como ya hicimos el año pasado, recogemos a continuación algunas de las predicciones acerca del futuro del diseño a corto plazo, tanto en la profesión de diseño como en las tendencias en diseño gráfico o, de forma más específica, la manera en que previsiblemente van a evolucionar algunos de los dispositivos con los que interactuamos a diario.

Diseño centrado en el usuario, y en el mundo real

En relación a la evolución del diseño en este año, el periodista Mark Wilson propone 9 tendencias que darán forma al diseño en 2018, a partir de las opiniones de diversos diseñadores. El diseño centrado en el usuario toma protagonismo a medida que se desarrollan nuevas formas de interacción humano-máquina mediadas por el desarrollo de la inteligencia artificial y el acceso a grandes cantidades de datos sobre el mundo real. Según Samuel Adaramola, diseñador jefe en la plataforma política Our Revolution, el diseño de las campañas políticas y los movimientos sociales se va a centrar más en las personas, buscando facilitar herramientas para el activismo local, la toma de decisiones en comunidades reducidas y la movilización social. De manera similar, al centrarse en las personas el diseño tendrá que tener en cuenta las diferentes necesidades y habilidades de distintos grupos de personas, por lo cual el diseño inclusivo o universal tomará un mayor protagonismo. Según afirma Justine Lee, de la agencia de diseño Frog, “el auténtico desafío va a ser diseñar para todos.” Un número cada vez mayor de empresas está considerando la accesibilidad de sus productos, y en este sentido uno de los retos es saber por dónde empezar y conocer mejor a sus usuarios. A nivel de la tecnología, el desarrollo de la Inteligencia Artificial puede ayudar a esta personalización de la experiencia del usuario y a procesar la gran cantidad de datos que hay disponibles. Para Branko Lukic, fundador del estudio Nonobject, nos hallamos ante una nueva revolución industrial en la cual la Inteligencia Artificial va a transformar el diseño e incluso dar forma al Diseño de IA (AID, en inglés) como disciplina:

“Actualmente, la tecnología marca la pauta en el desarrollo de la Inteligencia Artificial. Pero de la misma manera en que humanizó la tecnología, el diseño va a jugar un papel fundamental en el desarrollo y la adopción de la IA.”

Partiendo del diseño de producto y el diseño de interacción y combinando conocimientos de sociología, etnología, ecología, biología, física, ingeniería mecánica, electrónica, desarrollo de software y otras disciplinas, el Diseño de Inteligencia Artificial adquirirá una identidad propia, en opinión de Lukic, y tendrá como misión hacer que la IA sea útil y segura para los humanos. Otra consecuencia del desarrollo de la Inteligencia Artificial será el procesamiento de datos para mostrarnos, en palabras de Manuela Veloso, directora del departamento de Machine Learning en la Universidad Carnegie Mellon, “aquello no podemos ver.” Veloso se refiere, por ejemplo, a la posibilidad de conocer la posición exacta del coche de Uber que viene a recogernos, pero también se aplica a la enorme cantidad de información a la que tenemos acceso y la que generamos a diario. Todos estos datos se pueden convertir en información útil y comprensible gracias al diseño y el uso de la Inteligencia Artificial. Esta información, afirma Veloso, “tiene que volver a las personas, y no sólo en forma de gráficas.” El mayor peso de la máquina y su capacidad de cálculo y procesamiento de datos se verá contrarrestado por una tendencia a hacer desaparecer la interfaz y centrarse en los objetos cotidianos y las interacciones físicas, dejando de lado las pantallas. En opinión de Olof Schybergson, director ejecutivo de Fjord, “pronto no tendremos que distinguir entre diseño digital y físico, serán uno.” Los objetos inteligentes serán cada vez más numerosos y pensar en la experiencia de usuario con estos objetos implicará cambios en la manera en que se diseña y cómo se reestructura una empresa cuando ya no es preciso diferenciar un departamento dedicado al diseño digital. Esta tendencia también se traducirá en otro tipo de productos, los comestibles, según sugiere Katrina Markoff, fundadora de Vosges Chocolate. Cada vez buscamos más productos comestibles para todo tipo de soluciones, ya sea para dormir, tener más energía, adelgazar o desarrollar la creatividad, según apunta Markoff, y por tanto habrá una tendencia creciente hacia el diseño de productos naturales destinados a una función concreta.

Con todo, el diseño bidimensional (en pantallas y publicaciones) no dejará de ser importante, y también se verá marcado por nuevas tendencias (ver más abajo). Una de ellas es la superación del diseño plano y geométrico que ha predominado durante 2017. Sutilmente, se van integrando efectos de profundidad y volumen en lo que solían ser formas totalmente planas con colores uniformes. “El estilo del Material Design de Google ha aportado una interesante dimensión física a las formas planas,” afirma Forest Young, jefe de diseño en la agencia Wolff Olins en San Francisco, “ha humanizado los elementos visuales y ha prestado especial atención a cómo se mueven los elementos.” Young también apunta que el esqueumorfismo, que se había abandonado hace años, vuelve en los objetos creados para Realidad Aumentada, como una manera de facilitar la transición entre los objetos virtuales y el mundo real. Finalmente, una tendencia a destacar en este año es la toma de conciencia por parte de los diseñadores de las consecuencias del diseño en el entorno, en la sociedad y en la política, según apunta Mark Rolston, fundador del estudio Argodesign. Según Rolston, “2018 va a plantear la pregunta más difícil: ¿somos parte del problema, o estamos dispuestos a poner en riesgo nuestra nueva posición, tan arduamente conseguida, para ser parte de la solución?”

El futuro de los asistentes de voz

Los productos más destacados de 2017 fueron los asistentes de voz Amazon Echo y Google Home, a los que se sumó HomePod de Apple en una auténtica batalla por conquistar los hogares de los usuarios. El periodista Jared Newman ha elaborado una lista de ocho tendencias que marcarán el desarrollo de estos y otros dispositivos similares, cuya popularización marca la manera en que va tomando forma el hogar conectado e inteligente. Paradójicamente, una de las tendencias es precisamente ir más allá del hogar y lograr integrar los servicios de estos asistentes en los coches y en la rutina diaria de los usuarios por medio de auriculares con mayores capacidades para interactuar por medio de órdenes de voz y la recolección de datos del entorno en tiempo real (lo cual aporta información acerca del contexto en que se encuentra el usuario y permite refinar las opciones y respuestas posibles). Otro entorno que puede verse invadido por los asistentes de voz son las oficinas. El primer terreno de pruebas ha sido el hogar puesto que es un entorno controlado e informal, en el que los asistentes pueden interactuar con los usuarios en cuestiones que normalmente no son de gran importancia. Al entrar en el ámbito del trabajo, los dispositivos deben responder a criterios más estrictos y ser capaces de facilitar video conferencias, responder a órdenes útiles en este contexto y desarrollar un reconocimiento de voz más preciso que permita determinar a quién debe obedecer el aparato. El desarrollo de estos asistentes también sitúa a otros objetos inteligentes (lámparas, enchufes, etc.) en la posición de ser meros accesorios, puesto que evidentemente el usuario no quiere tener que configurar o interactuar con cada objeto de manera independiente, sino que prefiere emplear un sólo dispositivo que controle a todos los demás. El diseño de estos productos deberá por tanto buscar la compatibilidad con los asistentes de voz más vendidos. Finalmente, otro aspecto que puede hacer destacar a los asistentes de voz este año tiene que ver (una vez más) con el desarrollo de la Inteligencia Artificial, que facilitará una interpretación más compleja de los comandos de voz y también que el usuario pueda dar más de una orden al dispositivo a la vez y de manera más fluida.

Diseño minimalista e impactante

En el diseño gráfico es tal vez donde más claramente se hacen visibles las tendencias que cambian año tras año, si bien algunas de ellas se introducen de manera sutil. Los diseñadores Michal Sloboda y Ondřej Zita han recopilado las tendencias que, en su opinión, marcarán el diseño gráfico y de experiencia de usuario en 2o18. Una de las principales es la continuación del minimalismo en las formas visuales, con la eliminación de todos los elementos superfluos (en especial en las interfaces de usuario) y el uso de colores vivos y tipos de letra llamativos. Pese a este minimalismo, como hemos indicado más arriba, el diseño plano va incorporando sutiles efectos de profundidad y volumen. La tipografía destaca por hacerse más grande y emplear las negritas para llamar la atención del lector. También se imponen las tipografías experimentales, con combinaciones de estilos o con cortes que muestran sólo una parte de las letras, haciendo que resalten y en ocasiones resulten poco legibles. Estos titulares se combinan con colores vivos y llamativos que buscan captar la atención del usuario en una era en la que claramente hay un exceso de estimulación visual. Incluso en la promoción de un film cuya temática tiende a los tonos oscuros como es Blade Runner 2049 se ha optado por colores vibrantes y de gran contraste. Otra manera de hacer atractivo un diseño es emplear el dibujo hecho a mano para marcar una diferencia frente a la proliferación de formas geométricas y dar un aire más cálido, cercano y desenfadado a la comunicación. En cuanto a las fotografías, sigue siendo común ver las combinaciones de imágenes en forma de doble exposición y con el recurso al duotono. En opinión de Sloboda y Zita también se popularizarán los cinemagraphs (fotos que incorporan una animación en algún elemento), si bien estos han estado presentes desde hace años y no parecen haber logrado mucho éxito. Por último, el desarrollo de logotipos que se adaptan al tamaño de la pantalla indican una mayor atención al diseño web responsivo que en definitiva remite al concepto principal en el que se mueve el diseño este año: siempre adaptable y pensado para el usuario.

Otras predicciones:

Tendencias de diseño en 2018 – Fjord

12 tendencias en tecnología para 2018 – Frog

El futuro de la Inteligencia Artificial en 2018 – FastCo Design