Futuracha Pro, una tipografía que se dibuja sola
Høly, una agencia creativa basada en Atenas, se dio a conocer hace unos años con su atrevida Futuracha, una tipografía que se basa en la sólida geometría de la Futura Book y extiende los bordes de cada letra en formas decorativas que recuerdan a antenas y ramas con una marca inspiración art déco. Si bien se había creado tan sólo como un experimento y estaba disponible únicamente en formato EPS (lo cual obligaba a crear palabras manipulando cada letra individualmente), la tipografía ha tenido una amplia aceptación, siendo descargada (según indican sus creadores) más de 245.000 veces y empleada por diseñadores en más de 180 países para todo tipo de proyectos. El inusual aspecto de la tipografía (que en ocasiones puede resultar de difícil lectura) resulta ideal para su uso en titulares y logotipos o bien para crear ornamentaciones basadas en las letras.
Animado por la enorme aceptación de Futuracha, el equipo de Høly ha trabajado en una versión OpenType que permita escribir con esta tipografía, si bien la particularidad de su diseño plantea el reto de hacerla «funcional y tipográficamente consistente, sin traicionar sus características primarias, excéntricas y extravagantes», según afirman sus creadores. Para ello, han lanzado un campaña de crowdfunding con el fin de recaudar los fondos necesarios para desarrollar una tipografía que se modifique automáticamente en función del orden de las letras, creando así diferentes maneras de enlazar unas y otras en función de la palabra escrita.
Futuracha Pro ha logrado ya su objetivo de financiación, superando con creces el importe inicial pese a que no ha acabado el período de la campaña. Parte del éxito se debe a la propia popularidad de la tipografía y la demanda que ha generado, así como a las recompensas ofrecidas en la campaña, que incluyen diversas licencias junto a productos elaborados con este peculiar tipo de letra. Futuracha Pro ejemplifica las posibilidades de creación con familias tipográficas adaptables, a la vez que da cuenta del éxito que puede tener una campaña de micromecenazgo dedicada a una tipografía.